Aparentemente, se está poniendo de moda que las lunas tengan plumas de agua. Continuando con la discusión sobre Encélado y sus géiseres extraterrestres, la NASA anunció que el Telescopio Espacial Hubble acaba de encontrar más evidencia de la posible existencia de plumas de agua en el Sistema Solar, pero esta vez en el barrio de al lado, en una de las lunas de Júpiter, Europa.
Decimos más evidencia porque los astrónomos creen haber visto estas plumas mediante observaciones desde la Tierra, en 2012 y en el 2014. Sin embargo, en el 2016 el telescopio Hubble encontró lo que parecería ser otra pluma exactamente en el mismo lugar que la observada en el 2014, arrojando aparentemente agua a más de 100 km de altura hacia el espacio.
Para algunos esto podría ser una prueba suficiente de la existencia de estas plumas, pero debido a la manera en que se realizaron las observaciones no se puede asegurar si son de agua y ni siquiera si realmente existen.
Al igual que con Encélado, los astrónomos planetarios están fascinados con Europa porque es probable que debajo de su superficie congelada haya un enorme océano de agua líquida. De hecho, probablemente Europa tenga el doble de agua que todos los océanos de la Tierra combinados.
Por años, los investigadores han estado esperando con ansias poder conseguir evidencia concreta de la existencia de este océano, tal como ocurría con Encélado. Sin embargo, en el caso de Europa las plumas sólo pueden ser vistas cuando una de ellas erupciona en el momento en que Europa pasa por delante de Júpiter, desde la perspectiva del Telescopio Hubble. En ese momento la pluma bloquea parte de la radiación ultravioleta proveniente del planeta, lo cual nos permite ver una «silueta» de la misma con el espectrógrafo a bordo del Hubble.
Los posibles avistamientos del 2014 y del 2016 provinieron del mismo punto de la superficie de Europa, el cual, de acuerdo a la información colectada por la sonda Galileo de la NASA, parece ser un punto caliente levemente agrietado. Esto podría significar que existe un lugar en Europa con plumas regulares que de alguna manera están calentando la superficie circundante.
Siempre existe la probabilidad de que se esté mal interpretando los resultados, dado que el telescopio Hubble no fue diseñado para hacer este tipo de observaciones. Por el momento, el plan es seguir usando el Hubble para continuar con el monitoreo de la superficie de Europa hasta que surjan otros proyectos que permitan obtener información más confiable.
Muy pronto tendrá lugar el lanzamiento del Telescopio Espacial James Webb, el cual estará dotado de una cámara infrarroja que podrá confirmar si estas pseudo-plumas realmente existen. Aún más, la Misión de Sobrevuelos de Europa, programada para el 2020, tendrá una poderosa cámara ultravioleta a bordo y podrá acercarse más al satélite que el Hubble.
Con un poco de suerte, dentro de unos pocos años podremos decir si las plumas de Europa realmente existen y de qué están compuestas, tal como ocurrió con las de Encélado. Por lo pronto, parece ser que la mayor promesa de existencia de vida fuera de la Tierra estaría no en un lejano exoplaneta sino aquí cerca, en la comodidad de nuestro propio barrio planetario.
Fuentes:
- http://iopscience.iop.org/article/10.3847/2041-8213/aa67f8
- https://www.nasa.gov/press-release/nasa-missions-provide-new-insights-into-ocean-worlds-in-our-solar-system
- https://www.nasa.gov/press-release/nasa-s-hubble-spots-possible-water-plumes-erupting-on-jupiters-moon-europa